Recuerda que “preocuparte es usar la imaginación para crear algo que no deseas”. Nuestra imaginación es uno de los instrumentos más maravillosos, increíbles y poderosos que tenemos los seres humanos a nuestra disposición. Nos permite focalizar nuestra energía en aquello que imaginamos y comenzar a disponer los recursos necesarios para su manifestación en este plano físico.
Por ello, para nuestro bien y el de los que nos rodean, debemos emplearla de la manera correcta y deseada…Para conectar con aquellos recursos que nos ayudarán a crear lo que deseamos y no lo que no deseamos.
Cuando nos dejamos llevar por el miedo, se activan nuestras preocupaciones y con ellas, nuestra imaginación comienza a trabajar en “Cómo crear lo que NO deseamos”. Por lo que, es sencillo: Cada vez que te sientas preocupado, es que estás pensando en lo que no deseas que ocurra. Detente, respira profundamente y pregúntate: “Si no deseo que ocurra esto entonces ¿qué quiero que ocurra en su lugar?. Y mantén tu imaginación enfocada y entretenida en esa respuesta.
Enfócate siempre en lo que deseas y desde allí conectarás con los recursos necesarios para traer a tu vida esa realidad concreta o su equivalente emocional, es decir, algo diferente en la forma pero que trae consigo la esencia emocional de tu deseo. Pon a trabajar la imaginación siempre a tu favor y un nuevo mundo de posibilidades se desplegará ante ti!
No hay comentarios:
Publicar un comentario